Sobremedicación Psiquiátrica

De la moda “psi”, con su círculo vicioso de dependencia y egocentrismo, que no me merece mucho respeto, pasamos a la moda “pastillita”. Para todo parece haber un fármaco efectivo. La felicidad parece venir en píldoras. O al menos el control. No sé que cosa es peor. Sobre todo cuando se trata de menores, y son otros los que deciden por ellos.

Días pasados comentábamos con un grupo de amigos, la enorme cantidad de adolescentes medicados por cuestiones psiquiátricas, y con varios años de medicación encima. Ya sea por exceso de ansiedad o por depresión. No digo que alguna vez esto no sea necesario... pero creo que más de las veces, la medicación no solo no soluciona nada sino que termina estigmatizando. Los daños colaterales suelen ser más notables que los beneficios: problemas de concentración, alteraciones de la personalidad, ausencias, etc. Y así, estando en sintonía con este asunto, dí con la nota publicada ayer por LNOL en la que se hablaba de los efectos colaterales de algunas drogas utilizadas en psiquiatría. Aparentemente los laboratorios beneficiarían económicamente a los psiquiatras que utilizan determinada medicación para usos no autorizados a través de sistemas indirectos, como contratarlos para charlas en congresos en los que se debate el tema. La idea resulta realmente aterradora. Porque si bien es cierto que la ciencia siempre necesita conejillos de indias (lamento lo crudo de esta afirmación) éticamente es absolutamente inaceptable que los conejillos de indias no sepan que lo son y que no hayan tenido la oportunidad de elegir.

No coincido con la mirada psicológica que ignora la realidad biológica como si los hombres fueran entes angélicos. Pero este desenfreno por la medicación psiquiátrica para regular la conducta de niños y adolescentes, me parece que está poniendo en evidencia cierta decadencia en las relaciones humanas, en la capacidad para comprender al otro...

Se dice que los psiquiatras tienen fama de medicar con mucha facilidad. Pero lo cierto es que el contexto les da vía libre para hacerlo. ¿Por qué la sobremedicación psiquiátrica está de moda?

por Graciela Paula Caldeiro