¿Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción, y el mayor bien es pequeño: que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son.

Pedro Calderón de la Barca

Soy de esas personas que sueñan con frecuencia. Sueños lindos, los más. Sueños simbólicos, generalmente. Historias complicadas o quizá elaboradas, diría. Producciones oníricas en donde las personas se transforman, se funden en una o se dividen en dos. Donde algunos hacen lo que nunca se atreverían a hacer, incluso yo misma puedo ser más valiente o hasta más buena. En la dimensión onírica es posible plasmar los deseos sin escrúpulos ni previsiones, desafiar los límites, volver a los que ya se fueron, encontrar lo que dejamos en el camino, resolver lo que había quedado olvidado por ahí... en esos casos pienso que soñar es una bendición, un automático creativo, una productora cinematográfica de lujo y a medida, con capacidad para sorprenderme interactivamente... una maravilla de la naturaleza.

Pero uno también tiene pesadillas. Eso que jamás querrías vivir. En esos casos pienso que soñar es horrible, una suerte de castigo divino. Uno se despierta sobresaltado agradeciendo que la dimensión onírica se haya disuelto al abrir los ojos. Y en esos transes de desesperación nocturna, he observado un factor curioso...: una sed intensa. Me pregunto si el sobresalto de la pesadilla no será un mensaje de nuestro cerebro para hacernos despertar y evitar que nos deshidratemos durante el descanso nocturno. ¿Han notado alguna vez algo parecido?

por Graciela Paula Caldeiro